Obra del pintor Miguel José Isgró Bravo
DAR EL PRIMER PASO
©Giuseppe Isgró C,
“La iniciativa expresa
el poder inventivo del ser humano en cualquiera de sus vertientes y variantes y
determina que las cosas sean cada día mejor, en un mundo en constante transformación”
Existen dos grandes momentos, en la vida de cada persona, que
día a día se afrontan; el primero, cuando se deben resolver situaciones; el
segundo, cuando se deben realizar objetivos.
Ambos casos implican una serie de circunstancias, unas que se
enfrentan, y otras que deben ser afrontadas, con coraje y sin evasión, con
serenidad, buen humor y paciencia. Viendo, además, la oportunidad implícita
dentro de ambas situaciones.
En cualesquiera de los casos que puedan presentarse, en todas
sus vertientes, existen dos fuerzas que actúan: una, que impele a la acción; la
otra, de bloqueo, que inhibe toda acción.
Esto amerita, ante de todo, mantener la calma, la serenidad y
la tranquilidad, para que la lucidez mental pueda expresarse y ver con claridad
la realidad de las cosas, tal como son, y sopesarlas, asumiendo la propia
responsabilidad frente a las mismas. Esta actitud, activa por sí misma la
propia fuerza creadora para resolver lo que sea preciso y alcanzar cualquier
meta que cada quien se anteponga como objetivo.
La fuerza de empuje, cuando se expresa, impele a la acción.
Esto significa, la mayoría de las veces, la percepción intuitiva de una idea,
en ambas vertientes, que soluciona una situación, o define un resultado por
lograr, como objetivo o meta. Al mismo tiempo, la intuición se expresa como
motivación al logro. También, implica una inspiración, por medio de una idea
transmitida desde la dimensión espiritual al pensamiento, que se expresa como
entusiasmo, catalizador de las grandes realizaciones.
El entusiasmo es la expresión de Dios dentro de la conciencia
del ser, por el lenguaje de los sentimientos de los valores universales: del
amor, del deber, de la justicia, del bien y de la belleza, entre otros.
En cualquiera de estas variantes, denota, en el ser que las
aplica, una excelente capacidad de iniciativa, que le permite, además de
percibir la idea realizadora, aplicarla, hasta alcanzar los resultados
apetecibles, muchas veces abriendo nuevas rutas antes inexistentes, bien sea creando
o innovando nuevos bienes o servicios.
La iniciativa es una fuerza creadora de alcances ilimitados.
Como decía Lao Tse: -“Un camino de mil leguas empieza dando el primer paso”.
Puestos en movimiento, después de vencer la fuerza de inercia inicial, la misma
fuerza de inercia del movimiento nos mantendrá en acción hasta alcanzar la
meta, por distante que esta se encuentre.
La iniciativa expresa el poder inventivo del ser humano en
cualquiera de sus vertientes y variantes y determina que las cosas sean cada
día mejor, en un mundo en constante transformación.
La iniciativa comienza como una idea; la creencia en ella la
intensifica; la confianza la dinamiza; la inspiración la ilumina; la motivación
abre caminos y el entusiasmo permite la persistencia hasta alcanzarla. Todo es
posible para quien crea que puede y se pone en camino con tal finalidad,
persistiendo, contra viento y marea hasta que lo que antes parecía imposible, sea
ahora una realidad.
Puedes si crees que puedes y lo demuestras mediante la
iniciativa dando el primer paso para hacer realidad tus sueños.